Características del bebé: 8 meses
El bebé de 8 meses: ¿Cómo crece el bebé en esta etapa? ¿Qué nuevas habilidades adquiere en este mes? ¿Qué comidas darle?
En esta etapa suele aparecer la famosa "angustia del octavo mes”. A partir de ahora tu bebé es capaz de distinguir entre conocidos y extraños y percibir que cada persona (mamá, papá, e incluso él mismo) es única e independiente y es normal que esta “separación” le provoque ansiedad. También es normal que se despierte varias veces por noche y quiera verte, ya que necesita sentir que estás cerca.
Muchos bebés comienzan a gatear entre los 8 y 11 meses, sin embargo, cada niño tiene sus tiempos, e incluso algunos no gatean y pasan directo a caminar.
No hace falta enseñarle a gatear, simplemente hay que asegurarse de que esté en el piso el mayor tiempo posible para que pueda probar sus habilidades, jugar y desplazarse libremente. Respetar sus tiempos y mostrarle confianza lo ayudará a adquirir autonomía y animarse a explorar.
En el transcurso de este mes también es posible que tu bebé comience a pararse apoyándose en muebles o en lo barrotes de la cuna y tal vez de unos pasitos. Lo ideal es dejarlo descalzo, y en caso de ponerle calzado, optar por uno que sea lo más blando posible.
Para estimular el lenguaje expresivo y comprensivo de tu bebé, lo mejor es que le hables mucho, que relates lo que van haciendo en el día, que le cantes canciones y que le leas haciendo distintos sonidos, como por ejemplo, cuando miran imágenes de animales decir: “el perro hace guau”, “el pato hace cuac”, “el gato hace miau”, etc.. Esto lo ayudará a incorporar nuevos conceptos. Mostrarle fotos familiares señalando los nombres de cada integrante es otra manera de estimularlo.
Alimentación: a partir del octavo mes se suele incorporar la segunda comida del día: si la primera comida era el almuerzo, será la cena, o viceversa.
Para tener en cuenta:
Miel: la miel fresca sin pasteurizar puede transmitir botulismo, una enfermedad grave del sistema nervioso, especialmente en los niños pequeños menores de 3 años. Por lo tanto, no se recomienda su consumo.
Alimentos duros: maníes, granos de choclo, pochoclo, caramelos duros y frutas secas son alimentos que por ser muy duros y no disolverse rápidamente en la boca, conviene evitar ya que el niño podría atragantarse.
En cuanto a las porciones, no hay patrones fijos, algunos bebés pueden terminar rápidamente un par de platos de papilla mientras que otros apenas si lo prueban. También puede suceder que el mismo bebé algunos días coma menos que otros. En todo caso, lo más importante es que crezca adecuadamente, y esto lo determinará el pediatra en cada consulta. Como padres hay que proveer alimentos saludables para su edad y respetar tanto el hambre como la saciedad del bebé, sin privarlo ni forzarlo a comer.
Sueño: si aún se despierta por las noches y te resulta muy complicado seguir con este ritmo de sueño, en esta nota encontrarás algunos consejos que pueden ayudar a que todos descansen mejor.
¿A qué jugamos?
Imitar: ahora que tu bebé puede imitar gestos y repetir series de consonantes y vocales, proponele juegos en los que tenga que mover las manitos como vos, o repetir sonidos como “pa pa pa”, “ma ma ma”, “ta, ta, ta”, etc..
Sonidos: agitar, golpear y arrojar sus juguetes una y otra vez es parte de la diversión en esta etapa. Un sonajero, una maraca, un papel que pueda arrugar o rasgar o cualquier otro objeto que haga sonido y que esté al alcance de sus manos es perfecto para que se entretenga. Cono se lleva todo a la boca, hay que tener especial cuidado con lo que se le ofrece para jugar.